Hace un par de años me tocó reseñar 5 productos de la línea Skin Food de Weleda que amé: productos frescos, livianos, super efectivos hidratando y de fácil absorción. Ahora esta línea tiene una novedad: un aceite seco ultraligero. 

Cuando me llegó el producto y leí aceite, confieso que sentí desconfianza y un poco de desagrado. Me cargan los aceites y la sensación grasosa en la piel. Para mi pelo crespo prefiero siempre productos cremosos en vez de aceitosos, y en la cosmética facial me pasa lo mismo. Pero no os dejéis engañar por su nombre, en el caso de este producto, el "seco ultraligero" importa más que el "aceite". A continuación les contaré porqué me fascinó este producto y porqué lo super recomiendo para hidratarse este verano, y también el resto del año.

Partamos por el motivo (o más bien mi motivo) principal: Weleda es una gran marca. Vienen desarrollando cosmética natural desde 1921 (cuando el concepto era extraño y el esfuerzo era pura innovación) y a lo largo de los años su crecimiento ha sido comprometido con el medioambiente y las personas. Cuentan con una serie de compromisos, certificaciones y sellos que aseguran que sus productos son desarrollados y elaborados en condiciones que buscan minimizar su impacto negativo en el planeta, y amplificar el impacto positivo en el bienestar de las personas con estándares de sostenibilidad. A pesar de que probablemente por este mismo motivo no es una marca masiva y accesible para todas las personas que quisiéramos, me encanta Weleda y me encantan sus productos.

Sobre los sellos y certificaciones: 100% de los productos tienen certificación de origen natural, más del 80% de las materias primas tienen certificación orgánica, tienen la certificación de Empresa B, junto con otros compromisos de mitigación ambiental, y la clave para esta comunidad: todos sus productos son libres de crueldad animal. Ningún conejito fue lastimado en la fabricación y testeo de este aceite bifásico seco ultraligero 💗🐰

Sobre el producto: si bien es un "aceite", la sensación luego de la aplicación se parece más a la de un tónico o loción. La absorción es muy rápida y la hidratación es sumamente efectiva. Le pedí a una amiga que me ayudara a probarlo en los brazos, que suelen secársele mucho, y después de 3 días probando su crema hidratante habitual en un brazo, y el aceite en el otro, la diferencia fue notoria. 

Algunas observaciones que surgieron en el proceso de prueba: el olor me fascinó a mí, que suelo preferir los aromas herbales y amaderados, pero a mi amiga que suele preferir fragancias florales y semidulces, no le gustó mucho y lo sintió un poco mohoso. Por supuesto que se trata solo de un tema de gustos. De todos modos el aroma que viene de los extractos de pensamiento silvestre, caléndula orgánica, romero orgánico y manzanilla orgánica, es muy suave ya que el énfasis del producto está en la hidratación.

Otra observación: quizás porque comenzamos a aplicarlo en piel demasiado seca, la primera semana consumimos juntas la mitad del frasco de 100 ml. que se supone dura 40 aplicaciones, por ende nos pareció algo pequeño. Quizás exageramos, pero habría sido ideal contar con un envase de mayor tamaño para usar el producto a destajo, pero al mismo tiempo el aceite se siente suave y delicado, no masivo. Finalmente, quizás el problema no es del tamaño del envase si no de la falta de hidratación que nos afecta a mi amiga, a mí, y a miles. 

Finalizo con un llamado habitual pero siempre necesario: cuidemos nuestra piel, hidratémosla, limpiémosla, protejámosla. Si son como yo y les cuesta iniciar rutinas de cuidado, este es un excelente producto para dejar al lado de la cama y aplicarse rápidamente antes de dormir, tanto en el cuerpo como en la cara como complemento de la rutina de cuidado facial. La sensación de despertar con la piel suave y sana es realmente una delicia. Y si este aceite seco no resulta accesible para ti, tanto Weleda como muchas otras marcas certificadas libres de crueldad en Chile tienen otros productos disponibles. En esta ocasión recomiendo este aceite, pero siempre recomiendo buscar tu producto: el que tu piel, tus hábitos y tu presupuesto amen.

Y lo más importante, la decisión es nuestra: que ningún animal tenga que sufrir por nuestro cuidado y belleza 🥰 

Nos leemos luego, ¡un abrazo!