Amo agregar productos nuevos a mi rutina de skincare. Y esta vez tuve la oportunidad de probar este dúo de biofilia.

El primero es una crema hidratante antiedad que promete activar la formación del colágeno en la piel, con beneficios antioxidantes, aclarador de manchas y además ayuda a prevenir arrugas. Ideal si ya estás sobre los 25 años.

Mi piel es bastante seca, por lo que siempre busco hidratación extra, pero no me gusta quedar con esa sensación grasosa que dejan algunos productos. Por lo que esta crema ha sido ideal. La aplico después del tónico y con la cantidad justa de dos toques, me alcanza para todo el rostro.

No es para nada pesada y se absorbe muy rápido, así que no tengo que esperar mucho para aplicar el protector solar (eso me encanta). Además tiene un olor muy fresco, que me da una sensación de "carita limpia". Sin duda se ha vuelto un esencial en mi rutina. 

En segundo lugar está el Aceite de maqui, al igual que la crema es un producto antioxidante y regenerador. Como dice su descripción: "Es un óleo macerado en hojas de maqui y en aceite de almendras, ideal para el rostro, reafirma los tejidos y repara la piel dañada y agrietada."

Lo estoy usando en remplazo de mi crema de noche y me ha funcionado increíble, sobre todo en el contorno de los ojos, que es la zona que más se me reseca, hace algunas semanas tenía la piel "escamosa" en esa zona, producto del frío, y con este aceite esa parte de mi cara está mucho más suave.

Sin embargo, creo que también puedo usarlo antes de mi crema de noche, para conseguir mayor humectación en la piel. 

Lo que más me gusta de esta marca es sentir que estoy aplicando en mi rostro sólo nutrientes naturales, que sin duda le hacen mejor a nuestra piel que los químicos presentes en otros productos.

Ojalá les sirva esta reseña y recuerden lavar sus caritas todos los días!