Hace unos meses llegó a mi poder el humectante corporal Sleepy de Lush. Nunca había escuchado de él, así que no tenía grandes expectativas sobre su uso y beneficios, lo que se tradujo en una absoluta sorpresa para mi, porque me encantó. Fue amor a primera apertura de envase. El humectante corporal Sleepy promete lo siguiente: "dormirás en armoniosa paz después de sumergirte en esta hidratante de ensueño, hecha con delicada infusión de avena, que llena tu mente de reconfortantes y calentitos dulces. La cremosa manteca orgánica de cacao de comercio justo y la suave agua de lavanda calman y nutren la piel. Cubre tu cuerpo con esta fantástica loción antes de ponerte el pijama y disfrutar de noches acogedoras de invierno al calor de la hoguera". Suena a una exageración, pero es real. Sleepy tiene aroma a relajación y una textura tan suave que pareciera algodón en crema. Coincidió con que estaba pasando por unas noches de mal dormir, así que la utilicé antes de ir a acostarme aplicándola en mis brazos y cuello, y su aroma realmente me relajó. Sus ingredientes principales son absoluto de tonka, aceite de almendras, agua y aceite de lavanda, aceite de jojoba, aceite de ylang ylang, por lo que huele exquisito. Tengo el frasco pequeño hace unos aproximados tres meses y como no uso la crema todas las noches, me ha durado un montón, queda un tercio aproximadamente del producto. Lo recomiendo absolutamente, sobre todo para aquellas personas que necesitan un empujoncito extra para dormir bien. El frasco de 95 gramos tiene un valor de $9.990 y el de 21 gramos tiene un valor $16.500, y pueden encontrarlo en todas las tiendas Lush del país o en su página web.