Aunque pareciera que es llegar y aplicar, la verdad es que siempre nos encontramos con algunas sorpresas si el rímel se mal utiliza. Algunos detalles como pestañas aglutinadas, separadas o incluso párpados y ojeras manchadas son cosas que podemos evitar si aprendemos a entender cómo realmente se debe usar el rímel. Primero hay que ver lo que se nos ofrece. Hoy en día el mercado de las pestañas de muñeca son el pan de cada día, todas queremos tener esas largas y gruesas pestañas que nos presentan los comerciales, y si no las conseguimos muchas optan por las postizas, que lamentablemente de estético no tienen nada. Así que finalmente todo se reduce a lo que podemos hacer y lo que obtenemos con lo que tenemos a mano. Por lo tanto el resultado final son todas las opciones que comenté más arriba. En este post, hablé sobre como encrespar las pestañas correctamente, y aquí expliqué claramente que el efecto “pestañas postizas” se da únicamente por la forma del pincel. No es el maquillaje, el líquido o el compuesto en sí lo que causa esa curvatura, y es una de esas razones por la cual nuestros ojos a veces quedan cargados de pintura. Primero, algunas reglas básicas del rímel 1- Un maquillaje se define por el rímel. El rímel es lo que maquilla el rostro, lo que otorga efecto a la mirada. La piel puede estar sin maquillaje, pero las pestañas siempre decorarán. 2- Pestañas pegadas y separadas NUNCA vestirán la mirada, no es estético. 3- Las pestañas deben verse negras pero no tupidas. La gracia del rímel es que da la ilusión de que tenemos más pestañas. Se ven muy antiestéticas las pestañas largas con restos de rímel y tiesas. OjO, que este truco trata específicamente de explicar cómo usar el rímel, los demás pasos los estoy dejando a lo largo del artículo en diferentes links. Como en este otro post donde hablé sobre un método para ayudar a que el rímel no deje exceso de maquillaje. Para ello se debe limpiar un poco el pincel. No se preocupen si pierden producto, porque esa misma cantidad que queda en el papel es lo que desperdiciamos en nuestras pestañas, y es ahí cuando se pegan. Por eso si limpiamos los restos lo que queda en el pincel es la cantidad justa y necesaria para pintar nuestras pestañas. La forma práctica para pintar las pestañas se realiza con tres simples pasos 1- Una vez limpio el pincel comenzamos desde atrás hacia adelante cepillando las pestañas con el pincel como si fuera un serrucho. 2- La segunda pasada lo hacemos SIN volver a introducir el pincel en el frasco. Inclinamos la cabeza hacia atrás y con el dedo levantamos la esquina del párpado para pintar las pestañas del costado. Hacemos el mismo efecto tipo serrucho de atrás hacia delante. 3- Finalmente con lo que queda en el pincel, cepillamos las pestañas inferiores. El truco consta de NO volver a introducir el pincel en el frasco, y si lo hacemos porque queremos más color, entonces lo volvemos a limpiar, y luego, aplicamos. La aplicación del rímel debe ser hecha con cuidado. Pareciera que es fácil llegar y hacer, pero la gracia es que las pestañas se noten un poco más, no que se vean artificiales. Aunque hay gustos para todo recuerden siempre que menos es más, y para quienes les gusta usar mucho rímel, solo les recuerdo que mientras más ponen más fácil resultará que las pestañas se caigan y dejen de crecer. ¡Practiquen y jueguen! Si juntan todos los post sobre pestañas que he hecho, verán que no costará nada lucir unas pestañas lindas y sanas. Y recuerden siempre que son estas malcriadas las que finalmente dan luz al rostro (aún cuando estamos sin maquillaje), así que ¡cuídenlas! Por Catalina W. /@littletalks