Cuando me preguntaron cual sería mi producto favorito del 2013, pensé altiro en mi cremita. Desde que la descubrí la amo y no la cambiaría por nada. En mi primera visita a la tienda Route to Green iba decidida a comprarme esta cremita, y me llevé una gran sorpresa al saber que también podía usarla en el rostro.  Sé que suena un poco extraño al principio, pero pensándolo bien toda la piel de nuestro cuerpo es la misma (sé que suena super hippie mi lógica), quizás en la cara hay que aplicar con más frecuencia pero para mi ha resultado muy bien usar la misma crema para todo todo el cuerpo. Pasé mucho tiempo usando cremas para pieles hipersensibles, poco tolerantes, alérgicas, y con todas tenía el mismo problema, sino me salían granitos me salía una especie de sarpullido muy molesto. Créanme que las he probado todas, tengo un familiar que trabaja en farmacias y siempre me trae muestras, y nada ha funcionado. Para qué decir de cuando he intentado usar cremas para el acné, termino con más acné y rojeces que antes, no solo en el rostro (mi espalda y escote también sufren mucho). Pero ahora ha disminuido notablemente, esta cremita la tengo desde Noviembre del año pasado y me ha ayudado mucho con mis manchitas e imperfecciones. Lo más lindo de esta crema es que es vegana, apta para celíacos, apta para alérgicos a la soya, libre de parabenos y cruelty free. Tiene un aroma exquisito a coco, se absorve rápido y sus principales ingredientes son la manteca de karité y aloe vera. Si la quieren probar la pueden encontrar en la tienda Route to Green, tiene un valor de $8490.- y dura al menos 2 meses, a  mi me ha durado casi 4 pero la cuido mucho mucho. Besitos!