¡Hola a todos!

Soy Adriana, la nueva blogger de Te Protejo Latam en Colombia, mucho gusto en conocerlos. En realidad soy peruana pero vivo hace 18 años en Medellín. Estudié diseño publicitario en Lima y hace 23 años que trabajo en agencias de publicidad como directora de arte. Me gusta hacer cycling, nadar y correr algunas olas… solo cuando voy Lima porque Medellín es muy lindo y verde pero ¡no hay mar!. Además me encanta dibujar y si son animales mucho mejor, ¡ah! pero si son gatos, vaya que si lo disfruto porque soy una gatófila algo desbordada de amor por estos pequeños felinos.

Desde niña mis padres me enseñaron a amar a los animales. Recuerdo que, cuando tenía alrededor de 7 años, le pregunte a mi papá por qué nuestra familia no iba a la feria taurina como las de mis amigas. Él me respondió: “porque no es correcto celebrar a costa del dolor ajeno”. Yo le respondí: “pero un toro es grande y fuerte, seguro que no le duele”, a lo que él me refutó: “yo soy mucho más grande que tú pero si me cortas con una navaja, seguro me dolerá mucho” y como si fuera poco concluyó: “Adriana, recuerda que siempre debes demostrar compasión por el más débil y no abusar de la inteligencia que la vida te dio. Es tu deber hacerlo”.

A partir de eso y de otros sucesos relacionados con los animales, comencé a desarrollar un amor increíble hacia ellos. Siempre estuve rodeada de perros y ya en Colombia tuve a Balín, mi primer gato. El murió el año pasado, pero 5 meses después adopté a Kiwi que es mi adoración porque es el gatito más dulce e increíble que se puedan imaginar. Bueno, que más… pues que me volví vegetariana inicialmente porque sentía que debía ser consecuente con mi filosofía de vida y no apoyar la explotación animal indiscriminada e irresponsable para el consumo humano. Los cambios positivos los sentí desde el principio ya que dormía mejor, no me volvió a dar gastritis ni a doler el colon y tampoco a dar ningún brote de acné. Honestamente, ahora lo soy porque porque además le cogí repulsión al olor y al aspecto de la carne.

También he sido rescatista. No era que me pasaba todo el día mirando las calles y buscando a que perro o gato recogía, pero si alguien me llamaba para ayudar a alguno o si por esas cosas del destino, se cruzaba en mi camino, no dudaba en perseguirlo hasta lograr atraparlo, o salir a rescatarlo a las 12 de la medianoche en pleno aguacero torrencial, o en subirme en algún muro o árbol algo desmoronados, en invadir propiedad privada para llevármelo y bueno, hacer lo que fuera por evitar que un perro o un gato sufriera. Honestamente, me metí en tantos líos que podría escribir otro artículo solo de eso. Pero lo más importante de esta faceta de mi vida (que la verdad y si lo amerita aún lo hago) fue que terminé revaluando que tan aportante era hacerlo ya que cuando por fin lograba curarlo, vacunarlo, esterilizarlo y gastarme unos buenos pesos para poder darlo en adopción… ¡ay, aparecían otros 3!. Todas estas experiencias me llevaron a la conclusión que había que educar sobre esto y apoyar esterilizaciones masivas para evitar que el abandono siguiera en aumento.

Paralelamente, empecé a investigar acerca de la experimentación animal y fue así que supe que existían animales que permanecían hasta 10 años en condiciones lamentables, siendo quemados, cercenados, obligados a ingerir sustancias perjudiciales para cualquier ser vivo. Fue demasiado fuerte y triste. En mi opinión, esta es la peor forma de maltrato animal que puede haber.

Y bueno, ya con todo ese “botín” de experiencias y conocimiento, fue que creé Catscabel, una causa educativa a favor de los animales en donde además de promover el uso de marcas que no experimenten en ellos, publico artículos, entrevistas a profesionales en el campo, consejos y recomendaciones para promover la tenencia responsable de animales de compañía.

En Colombia el término Cruelty-Free aún es muy desconocido. Cuando hago publicaciones sobre el tema en Catscabel, muchos no pueden creer que esto sea posible. Algo que me llena de satisfacción es que hay muchas personas que han decidido migrar a esta forma de consumo. Trimestralmente hago trabajo de campo y actualizo un Listado de marcas certificadas disponibles en Colombia. Honestamente no son tantas como en otros países en donde se ha implantando más esta cultura pero bueno, ahí vamos. Hay muchas marcas locales, independientes que dicen no experimentar con animales y han estado muy interesadas en certificarse, sería muy bueno que algún día pudieran hacerlo y es por eso estoy muy contenta de unir esfuerzos y de hacer parte del equipo de Te Protejo Latam. 

Algo que me di cuenta cuando decidí consumir productos que no experimentarán con animales fue que siendo consistentes con su filosofía de amor y respeto hacia ellos, estas marcas lo son con el medio ambiente y tienen valores agregados como programas de ayuda social, desarrollos y propuestas de empaques novedosos, reciclables y hay algunos tan lindos que da tristeza desecharlos entonces los vuelvo reutilizables.

Entre mis marcas preferidas y que recomiendo a ojos cerrados están:

Pure Chemistry es mi preferida para el cuidado de la piel de la cara porque además de ser vegana, conozco a su creadora quién es muy consciente y respetuosa en sus procesos de fabricación, siempre innovando y tratando que su marca sea lo menos abrasiva e invasiva con las personas y el medio ambiente. Además tiene un mérito especial ya que es la única marca colombiana que ha logrado certificarse por PETA y Cruelty-Free Internacional. De ella aprendí mucho sobre el proceso de certificación y todo lo que implicaba poder usar los sellos en sus empaques. Pueden comprarla en el C.C. Premium Plaza, Medellín o también online en purechemistryonline.com o en cosmeticospure.com

Jane Iredale para maquillaje. ¡Me encanta! Es una marca hipoalergénica, dermatológicamente probada, mineral y casi todos sus productos tienen protección solar. Además son orgánicos y libres de talco, parabenos, ácido ftálico (muy dañino para la salud y muy usado en cosméticos) y colorantes artificiales. Es muy amigable con el medio ambiente porque muchos empaques son recargables y son tan lindos que provoca reutilizarlos. Pueden comprarla online en productoswow.com

L’Erbolario es excelente para el cuidado de la piel de la cara y el cuerpo, las fragancias de sus productos son muy suaves. Además tienen un desodorante que es libre de aluminio y muy efectivo. Cuando entras al almacén es una experiencia diferente porque es muy cálido y acogedor. Da la impresión de estar en una botica de los años 60s o una tienda de “pociones mágicas”. Pueden comprarla en el C.C. Santafé, Medellín.

Por último, Paul Mitchell me encanta para el cuidado del pelo porque tiene una línea completa para el pelo ondulado y además es libre de parabenos y ciertos metales muy dañinos para la salud. Yo la compro en la peluquería Barroco en el C.C. El Tesoro.

¡Muchas gracias y hasta la próxima!

Por Adriana, desde Colombia