Actualmente, existen múltiples factores que influyen en la crisis medioambiental. El aumento de la población y su creciente urbanización suponen la explotación de los recursos naturales para satisfacer las necesidades de alimentar, cultivar, brindar energía y seguridad económica, lo cual deteriora la tierra. Al mismo tiempo, la alta industrialización significa una contaminación de suelo, aire, agua y emisiones de gases de efecto invernadero, acelerando aún más la degradación de ecosistemas.

Acorde a los registros de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), la degeneración de la tierra y del medio marino, la disminución de fertilidad del suelo y el uso insostenible de agua han disminuido la capacidad de base de recursos naturales para suministrar alimentos. Bajo esta misma línea, se estima que un tercio de comida producida acaba pudriéndose en los basureros o estropeada, convirtiéndose en un desperdicio. Esto se agrava, teniendo en cuenta que el sector alimenticio representa alrededor del 30% del consumo total de energía y un 22% del total de emisiones de gases de efecto invernadero.

Por otra parte, la crisis del agua presenta un escenario complejo, considerando que actualmente la humanidad cuenta con alrededor de 0,5% de agua potable para su consumo, porcentaje que suele ser contaminado y usado en exceso, provocando escasez hídrica. Sumado a esto, el registro de energía va en aumento y así su contaminación al medioambiente, pues el consumo mundial de energía en los hogares es de un 29%, contribuyendo al 21% de las emisiones de CO2 resultantes, más el uso energético de empresas, plantas y vehículos aéreos, marítimos y terrestres.

Revertir estos efectos es parte del trabajo que realiza la Agenda 2030 por el Desarrollo Sustentable de la ONU, denominado este desafío como el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) n° 12 Producción y Consumo Responsables.

ODS Producción y Consumo Responsable

Este ODS tiene como objetivo modificar el modelo actual de producción y consumo con el fin de conseguir una gestión eficiente de los recursos, mediante procesos que eviten la pérdida de alimentos, un uso ecológico de productos químicos y reducir la generación de desechos. Este plan, requiere de adoptar un enfoque sistemático y cooperativo entre los participantes, es decir productor y consumidor, para minimizar el desperdicio de recursos y contaminación del ecosistema, así como lograr una mejor calidad de vida.

Te presentamos un resumen de las metas fijadas por el Objetivo Producción y Consumo Responsable:

♦Aplicar el Marco Decenal de Programas sobre Modalidades de Consumo y Producción Sostenibles, con la participación de todos los países y bajo el liderazgo de los países desarrollado, considerando el grado de desarrollo y capacidades de cada país.

♦ De aquí al 2030, se busca lograr una gestión sostenible y eficiente de recursos naturales. También reducir la mitad de desperdicio de alimentos per cápita mundial, a la venta, a nivel de consumidores y la de cadenas de producción.

♦ Conseguir una gestión ecológica de productos químicos y desechos, acorde a los convenios internacionales, para minimizar su liberación a la atmósfera, agua y suelo.

♦ Impulsar a empresas a adoptar prácticas sostenibles e incorporar información sobre sostenibilidad en informes.

♦ Promover la reducción de desechos mediante la prevención, reducción, reciclado y reutilización. Así como ayudar a países a su desarrollo de capacidad científica y tecnológica en dirección al consumo y producción más sostenible.

Este desafío repercute en toda la humanidad, por lo que es necesario sensibilizar a productores y consumidores mediante la educación sobre un modo de vida sostenible y amigable con el medioambiente. Aún más importante, es la implementación de políticas públicas que fomenten modalidades y normas sostenibles en el comercio, turismo, empresas, áreas alimenticias, entre otros.

Promover un consumo responsable y que respete el ecosistema, son los principales pilares de ONG Te Protejo. En razón de ello, para la organización es elemental generar un enfoque que abarque las aristas que benefician al medioambiente, como lo es la implementación de una dieta basada en plantas, optar por productos reciclados y sostenibles, y que no pongan en riesgo los animales y la naturaleza. Tomar acción ante esta situación, no sólo nos asegura como organización el estar cooperando para una mejor calidad de vida ahora, sino que permite dar paso a un mejor futuro para los animales, el planeta y la humanidad entera.

Fuentes: