Uno de los momentos más emocionantes de tener mascotitas en casa, es abrir la puerta y encontrarnos con ellos después de un largo día; moviéndonos la colita, buscando jugar con nosotros, mimarnos y que los mimemos.

Sin embargo, más allá de brindarles compañía y un hogar, ellos no son los únicos que encuentran bienestar en nuestro cuidado. Nosotros como responsables, también recibimos beneficios por tenerlos cerca. EL NIH (National Institutes of Health), grupo de instituciones del gobierno de Estados Unidos dedicado a la investigación médica, asegura que las mascotas pueden disminuir el estrés y la sensación de soledad, mejorar la salud del corazón, e incluso, ayudar a los niños con sus habilidades emocionales y sociales.

¿Por qué tenemos mascotas?

En una serie de excavaciones arqueológicas en Siberia, fueron encontrados restos de huesos de perros enterrados 8.000 años atrás en tumbas junto a seres humanos. En algún momento de la prehistoria, los lobos domesticados, con los que compartimos nuestras vidas de caza y defensa; pasaron a ser compañeros de vida y corazón hasta la muerte. Gracias a ello, nos acompañan las narices mojadas, las colas alegres, los gestos de juego y el cariño sin condiciones de perros, gatos y animalitos que se han convertido en parte fundamental de las familias.

Nuestros peludos compañeros ayudan a combatir la depresión y la soledad, pues su presencia estimula el contacto físico y la comunicación. En situaciones como el confinamiento, las mascotas han sido auténticos pilares emocionales para sus dueños. Aunque sea por un momento, pasar un rato con tu mascota te ayuda a distraerte y olvidar las preocupaciones. Además, cuidar de un animalito, acariciarlo, sacarlo para pasear y hablar con él, ayuda a reducir las emociones negativas como la ansiedad y la tristeza en períodos difíciles de tu vida. Aquellos que conviven con perros, realizan más ejercicio físico al pasearlos. Es más, diversos estudios demuestran que el carácter pausado de los gatos mitiga la ansiedad. Encima, su ronroneo produce una vibración considerada relajante.

Para los más pequeños, hacerse cargo de las tareas relacionadas con un animal de compañía es súper educativo. Les enseña a tener responsabilidades, a mantener rutinas y ser más disciplinados; por consiguiente, les inculca valores como la empatía o el respeto. Además, tener perro no solo implica la posibilidad de hacer más ejercicio al aire libre, también ayuda a socializar con otros propietarios caninos. Para las personas mayores, que en muchos casos viven solas, tener un perro es muy positivo, ya que ayuda a establecer contacto con otras personas.

Por otro lado, un estudio del norteamericano Center for Disease Control and Prevention (CDC), asegura que convivir con un perro, aumenta el nivel de endorfinas, un péptido que funciona como neurotransmisor y que es responsable de la sensación de bienestar, reduce el ritmo cardíaco y la presión arterial al disminuir el nivel de triglicéridos.

Del mismo modo, investigadores del Instituto Stroke de la Universidad de Minnesota, monitorizaron durante diez años a más de 4.000 personas con el objetivo de mostrar la relación entre el estrés y los problemas cardiovasculares. El resultado de la investigación determinó que los dueños de gatos experimentaron una reducción del 30% en el riesgo de muerte por ataque al corazón al tener unos niveles de estrés más reducidos.

Tener una mascota trae muchos beneficios al hogar y a nuestras vidas. Aunque lo más común es tener un perro o un gato como mascota, también existen otras opciones. Si tienes alergia al pelo de estos animalitos, puedes optar por adoptar otros como el conejo, el hámster o la tortuga, que también son excelentes compañeros.

Existen muchos motivos por los que podrías llegar a plantearte adoptar una mascota. Si no acabas de verlo claro, pregunta a tus conocidos que tengan un gatito, un perrito u otro animal en su hogar. Seguramente, te dará una serie de ventajas de tener una mascota y podrá ofrecerte muchos consejos para que la convivencia sea perfecta desde los primeros momentos.