La piel seca experimenta sensaciones incómodas, se tensa, se siente rugosa y la aplicación de un producto apropiado contribuye a mitigar las molestias. En ocasiones, los síntomas pueden ir acompañados de picor o ardor. En este caso tengo una mascarilla que hidrata y humecta la piel, solo debes tener unos ingredientes naturales que son:

1 aguacate bien maduro

2 cucharadas de gel de sábila

1 cucharada de miel vegetal

1 cucharadita de aceite de oliva

1 cucharada de leche de soya en polvo

Preparación:

Se procesan todos los ingredientes hasta formar un puré. Con este masajeamos suavemente en la cara y cuello y lo dejamos actuar durante unos 10 minutos. Retiramos delicadamente con una toallita y agua tibia.

Es suave al tacto y su tono es más uniforme. Su textura es suave y sus poros son poco visibles. La piel normal no presenta ninguna imperfección aparente. Sus células producen una cantidad adecuada de elementos que permiten mantener una buena hidratación y protegerla de bacterias. La mascarilla para esta piel es para matener un ph regular, la hidratación y la humeción. Se debe hacer una vez por semana. Los ingredientes son:

1 banano maduro

1 cucharada de miel vegetal

1 cucharada de crema agria vegetal

Preparación:

Se procesan todos los ingredientes en una licuadora. Esparce la mascarilla en cara y cuello, déjala actuar 10 minutos. Retiramos delicadamente con una toalla húmeda. Lávate la cara con agua tibia y luego salpícala con agua fría.

Deben enfrentar un problema de cantidad y calidad del sebo, lo que con frecuencia las hace víctimas de puntos negros e imperfecciones. Estas últimas, sin embargo, también pueden estar vinculadas con patologías como el eccema, por ejemplo, lo que dificulta su tratamiento. La mascarilla para este tipo de piel ayuda a nivelar la cantidad de grasa o sebo de la piel. Los ingredientes naturales son:

1/2 taza de avena

1/4 de taza de menta fresca picada

1/4 de taza de jugo de mandarina

Preparación:

Revuelve la avena con la menta en un recipiente y agrega poco a poco el jugo. Licua hasta obtener una pasta. Espárcela en cara y cuello y déjala actuar por 10 minutos. Esta mascarilla es mejor hacerla en la noche ya que se debe evitar el sol, ya que los cítricos manchan la piel.  Retírala con una toallita y agua tibia. Salpica tu cara con agua de rosas fría.

Podemos definir una piel sensible como aquella que tiene una tolerancia muy baja a las agresiones externas, como el sol, el viento, y demás contaminación del medio ambiente. La mascarilla para este tipo de piel nos ayuda a generar un poco de estabilidad en el ph para que evitar la irritación. Los ingredientes para esta mascarilla son:

2 cucharadas de manteca de cacao

4 flores de caléndula

1/4 de taza de aceite de almendras

Preparación:

Derrite en el microondas la manteca de cacao con la caléndula. Incorpora el aceite y deja reposar unos minutos. Cuela en un recipiente limpio y bátela vigorosamente por 10 minutos o hasta que se vuelva cremosa. Masajea la mascarilla en tu cara y cuello por unos minutos. Retírala suavemente con una toallita y agua tibia.