articulos |Publicado el 07-06-2022

Historia General del testeo en animales

Para entender sobre lo que viene en el futuro es necesario saber qué pasó en el pasado. Esto nos lleva a preguntas de cómo surge el testeo en animales, qué pasa en la ciencia actualmente, qué son las 3Rs y también entender cuáles son los derechos de los animales.

En este post encontrarás información sobre la historia del testeo en animales, para conocer datos históricos, qué ha cambiado y  poder tomar decisiones más conscientes en el futuro.

A diferencia de la problemática de la industria ganadera u otras industrias que usan animales, las pruebas con animales en cosméticos son una cuestión “menos visible”, pues los laboratorios y lo que pasa en ellos no lo ven directamente los consumidores como podría ser un pedazo de carne o maltrato animal. Sin embargo, eso no quita que estadísticamente más de 100 millones de animales mueren por su uso en laboratorios en todo el mundo y que 500 mil animales sufren y mueren al año en pruebas para la industria cosmética.

La investigación sobre animales vivos se ha practicado desde al menos 500 a.C. (Procon, 2016). Históricamente, los conejos, cuyes, ratones, gatos, perros y otros animales han sido utilizados para desarrollar tratamientos médicos, saber el nivel de toxicidad de los medicamentos, determinar la seguridad de los productos, y otros usos biomédicos, comerciales y medicinas. 

Sin embargo, la historia de la experimentación con animales se remonta a los escritos de los griegos en los siglos 4 y 3 antes de Cristo. El Médico romano del siglo II Galeno, disecaba a cerdos y cabras vivas, por lo que es conocido como el "padre de la vivisección" (Hajar 2011).

Dentro de la industria cosmética, estas prácticas se realizan desde el primer cuarto del siglo XX, luego de que una mujer quedara ciega por utilizar una máscara de pestañas. A partir de este suceso, la Food and Drug Administration (FDA) de Estados Unidos aprobó la Ley Federal de Alimentos, Medicamentos y Cosméticos en 1938, (HSI, 2017).

La aprobación de esta ley significó que se necesitara verificación de la seguridad de los productos cosméticos, lo que obligó a las compañías a comenzar a probar sus productos en animales. Para que un producto esté disponible en el mercado y pueda usarse con seguridad sin ningún riesgo para la salud humana, debía pasar por diversos procesos que involucraban el análisis de toxicidad de los componentes y del producto final.  No obstante, hoy en día existen métodos alternativos más éticos y seguros, que puedes leer aquí.

Asimismo, en el mundo se han originado varios movimientos contra la anti-vivisección; principalmente en Inglaterra, donde se formó la Sociedad para la Protección de Animales sujetos a Vivisección en 1875, también en EEUU , donde está la organización People for the Ethical Treatment of Animals (PETA), que impulsó el movimiento anti-testeo animal, así como el australiano Peter Singer que empoderó a los movimientos de los derechos de los animales y la lucha contra el testeo en ellos.

Muchas veces dialogando sobre la historia el testeo en animales y los métodos alternativos, surge en la conversación el principio de las Tres R, que significa: Reducción, Refinamiento y Reemplazo, una prueba en animal para “minimizar” el uso de animales, y de usar al animal en los experimentos más “humanamente”.

La Reducción: se refiere a usar el número de animales en lo mínimo, pero que permita el objetivo de resultados representativos, basados en criterios estadísticos. Enfatiza el uso de antecedentes (como la variabilidad de un determinado parámetro) que permitan fijar o estimar criterios estadísticos. La ausencia de este análisis terminaría finalmente desperdiciando animales y recursos, por no contar con el número mínimo necesario; o sobrepasarse del número adecuado, utilizando innecesariamente una mayor cantidad de animales.

El Refinamiento se considera cuando se justifica el uso del modelo animal, sin existir la posibilidad de reemplazo y se ha logrado la reducción al máximo. El refinamiento demanda adecuar el protocolo de trabajo para minimizar cualquier potencial estrés, dolor, sufrimiento o daño permanente que los animales puedan llegar a experimentar. El refinamiento abarca no sólo los daños directos asociados con los procedimientos experimentales, sino que también alteraciones asociadas a la reproducción, mantención, transporte y vivienda. Por lo tanto, destaca la necesidad de siempre mejorar el bienestar animal, en el manejo diario y durante los procedimientos. Este concepto, además, optimiza el bienestar animal y mejora la salud del mismo, lo cual finalmente ayuda a reducir al mínimo el número de animales a utilizar (debido a una menor variabilidad en la respuesta biológica en estudio).

El Reemplazo propone, toda vez que sea posible, reemplazar el uso de animales vivos en experimentación por otras alternativas viables o por animales menos ‘sintientes’. Esto incluye el reemplazo de muchos modelos animales o etapas experimentales por pruebas in vitro, cultivos celulares y simulación por medio de modelos matemáticos (computacionales).

Lamentablemente, el testeo en animales no es exclusivo de la cosmética, ya que también se encuentra relacionada en asuntos militares, tabaco, armas, y la industria química en general. 

¿Pero qué pasa en la modernidad? sabemos que la tecnología y comunicación  ha llegado a niveles globales inimaginables, entonces es un hecho que las pruebas en animales son del siglo pasado.

¿En verdad son necesarios los animales en los laboratorios? hoy en día existen diferentes métodos alternativos para obtener datos más eficaces y éticos. Hay diferentes movimiento que ha crecido entre los expertos en salud, entre ellos médicos y científicos, investigadores que se oponen a usar animales, por razones médicas, científicas y éticas. Estos afirman que las pruebas en animales está construido en una idea falsa, dado a que los resultados de un animal no se pueden aplicar en un cuerpo humano. Esto ha llevado a discusión que las drogas, vacunas y experimentos son diferentes de especie a especie, no entender esta diferencia ha provocado muertes y costos a la salud humana. 

“Cuando la investigación animal sea abolida, la enorme cantidad del presupuesto federal que se gasta en ella (mucho más de cinco mil millones de dólares por año sólo para el Instituto Nacional de la Salud) podrí­a invertirse en la prevención y la investigación clí­nica que realmente tienen posibilidades de mejorar la salud humana.” (AnimaNaturalis, 2020)

Por otro lado, con toda esta información nos lleva a preguntarnos, ¿qué pasa con los Derechos en los animales? en una mirada universal existe la bioética, que es el estudio de los problemas éticos originados por la investigación biológica y sus aplicaciones.

Estrictamente hablando, podemos decir que jurídicamente en algunos lugares los animales no tienen derechos. El significado de la palabra, en el aspecto legal, se menciona solamente personas y cosas, no hay momento de código civil que hable de los animales. Teóricamente en estos casos, se podría decir que los animales al no gozar de derechos tampoco tendrían que tener responsabilidades, y es ahí donde entra el dilema, porque sí podemos usarlos como objetos.

Como consumidores nos queda elegir productos libres de crueldad, elegir marcas o empresas que día a día buscan un cambio y que apoyan la investigación y ciencia alternativa, para que se generen cambios y mejores resultados sin la necesidad de aplicar crueldad en el proceso . Ayudemos a organizaciones que luchan a favor de los animales y exijamos a nuestros representantes que queremos leyes a favor del bienestar animal. Vivamos cruelty free. 

Referencias:

https://www.animanaturalis.org/p/543
https://www.hsi.org/issues/animal-testing/
https://www.animanaturalis.org/p/545
https://www.animanaturalis.org/en-laboratorios
https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S1319016413001096 https://www.animanaturalis.org/en-laboratorios